El Santo Sepulcro, que se encuentra en la Iglesia de Nuestra Señora de la Merced en Camagüey es un ejemplo del las amplias leyendas que muestra la tierra de los Tinajones. Por mucho tiempo fue la magnífica muestra de la orfebrería cubana debido a los objetos de plata que recubria al Sepulcro, y que hoy carece por la muestra del irrespetuo y el vandalismo a que ha sido sometido a lo largo de muchos años. De este hecho me enteré tras la investigación presentada por una historadora del arte camagüeyana en el Taller de Religiosidad Popular del Festival del Caribe. Pudiendo comprobar este hecho en mis últimas visitas a esta tierra y que la imagen que muestro corroboran mis palabras. La plata faltante ha sido sustituida por una tela metálica la cual no muestra el esplendor que tuvo este objeto litúrgico. Y yo me pregunto ¿La plata que fue robada dónde está?